terça-feira, 2 de outubro de 2012

Un País Rehén


Vivimos hoy una de las crisis más complejas de la historia reciente de la humanidad, en que los valores que antes se consideraban innatos e inamovibles están en peligro en nombre de los compromisos económicos que se derivan soberanía de las naciones.
Existe un amplio consenso sobre los derechos humanos y las libertades principales y las garantías de los ciudadanos. Este es el sentido de la libertad y la aspiración legítima a una vida de dignidad que se pone en duda por las políticas internacionales actuales. Queremos la libertad de elegir nuestro destino olvidando que un país solo puede aspirar a ser verdaderamente libre se garantizar un conjunto de necesidades básicas entre las que destaca el sustento básico.
Un país que depende de la ayuda financiera extranjera no es un país independiente. Un pueblo de un país cuya ayuda financiera depende de la evaluación de los inversionistas es un pueblo esclavizado. Un pueblo esclavizado no tienen derechos.
Para recuperar nuestra soberanía debemos romper las cadenas que nos aferramos a una deuda externa que sigue creciendo. Los dueños del dinero nos obligan a más austeridad  para que nos presten más dinero para que podamos satisfacer nuestras necesidades básicas, pero la austeridad  hunde nuestra economía y nos obliga a tener que pagar más para recibir algo, entregando sectores estratégicos nacionales inversores internacionales, dándoles también nuestros bienes y nuestro producto de trabajo diluida en los impuestos que se suman a todo impuesto que puede ser una fuente de ingresos fiscales.
Este es el camino tomado por el actual Primer Ministro de Portugal, que es rehén de su propia política, que no es más que arrodillarse ante los mercados, poniendo en la posición de 10 millones de rehenes portugueses que dependen de la buena voluntad de los mercados no se muera de hambre.
Desafortunadamente, en la situación en que nos encontramos en la actualidad y la alternativa inmediata a la política de Pedro Passos Coelho amenaza con ser el "Día de no recibir", es decir, el día en que no habrá ni un centavo para pagar salarios o pensiones ningún beneficio social. Por otra parte, el análisis de los resultados de la política actual, su continuación se hace inevitable en el mediano plazo este destino.
Por tanto, es fundamental repensar la estrategia de gobierno a corto / medio plazo, para que podamos recuperar la autosuficiencia que nos permite no necesitar otros para asegurar que nuestra gente pueda ver por lo menos garantizada con las principales herramientas mínimamente aceptables para particularmente en términos de alimentos, la energía, el vestido, la salud y la vivienda, un poco como Sérgio Godinho dijo: "Sólo hay libertad en serio cuando hay paz, pan, vivienda, salud, educación."
Para conseguir la dirección inversa y escapar del abismo es obligatorio el primer corte de Lisboa y sumergirse sin temor "deep Portugal", uno que no sea manifiesta en los blogs, pero no contribuyen a las manifestaciones con su voto para la elección gobierno. Conociendo su sentir, sus motivaciones, sus deseos y aspiraciones, pero también sus limitaciones es esencial para construir un proyecto asentado en la práctica, la experiencia del día a dia, en el "ser portugués".
No basta leer el libro de lecciones escrito por otros y adaptar su contenido a un continente en el que no tiene lugar. Ha habido nuevos horizontes, darse cuenta de la nueva realidad derivada de la globalización, estar dotado de la capacidad de ver más allá, para poder aspirar a ir a donde otros no tienen, al darse cuenta de que la junta desempeña en la economía mundial ya no es la misma que hace algún tiempo.
Para construir un nuevo camino no son suficiente ejercicios retóricos o los actos de fe que hagan simplemente cambiar el color del poder o los jugadores de poder. Es esencial  el ingenio, la sabiduria, la lucidez, el conocimiento exhaustivo de la realidad para elaborar urgentemente una estrategia viable que nos vaya a salvar del abismo y nos devuelva la libertad y la esperanza.
Insistir en un libro de lecciones mal escrito cambiando sólo  el diseño de los párrafos es tiempo perdido. Afirmar nuestra identidad, centrándose en la autosuficiencia, construir nuevos puentes con los países a los que  puedemos ser útiles, me parece que son componentes esenciales para poder mandar el silencio de los señores del dinero, dar una lección a Europa y al mundo, sembrando las semillas la libertad, la tolerancia, el respeto, la paz, el pan, la salud, la habitacion, la educación y el nivel de la convivencia pacífica entre los pueblos.
Tenemos los medios para poder tener el valor de decirles a los dueños del dinero, "gracias, pero no quiero ir  por allí!"

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